Las termitas atacan cualquier tipo de madera al cual puedan tener acceso. Desde sus galerías, construyen nidos subterráneos que les permiten tener acceso a las partes estructurales de las viviendas y a toda materia con compuestos celulósicos. Pero no sólo atacan las estructuras de la vivienda, sino que muebles y edificaciones también pueden verse afectadas.

Nuestras ciudades sufren cada día más infestaciones por termitas, siendo esto un grave problema para el patrimonio histórico y cultural de nuestras ciudades.

La causa principal de que este problema vaya a más cada día es la situación geográfica de España que junto a sus condiciones climatológicas, favorecen en gran medida al desarrollo y reproducción de estos xilófagos.

Dada esta situación, la eliminación de termitas subterráneas nos supone un nuevo reto, y uno de los factores que más nos dificulta la erradicación de estos xilófagos es saber cuales son las actuaciones prioritarias que han de ponerse en marcha, junto al número de especialistas necesarios y a qué coste.

Un proceso de eliminación de termitas subterraneas requiere de un estudio de un Plan Director exhaustivo, que delinee los métodos, procedimientos y presupuestos de cada fase:

· Evaluación de la localización del casco urbano

· Proyecto e implantación del Plan de Erradicación

· Supervisión de los tratamientos de erradicación

· Establecimiento de un sistema de gestión posterior a la erradicación de la plaga.